Nunca es agradable sufrir un accidente o enfermar cuando se está de viaje, pero al menos reconforta saber que Israel goza de unos estándares sanitarios de calidad. En los Territorios Palestinos no son tan avanzados pero, en caso de urgencia, se puede tener la tranquilidad de que los hospitales de Israel nunca quedan muy lejos.
Hay ciertas dolencias fruto de la ubicación geográfica que deben conocerse, en especial la deshidratación, los golpes de calor y las quemaduras solares.
Siempre es buena idea consultar una web oficial sobre la salud del viajero antes de partir.
Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación de España
Recomendaciones de viaje sobre Israel
Recomendaciones de viaje sobre Territorios Palestinos
EE UU (wwwnc.cdc.gov/travel) Se puede buscar el libro Health Information for International Travel (libro amarillo).
Organización Mundial de la Salud (http://www.who.int/es/index.html) Se puede descargar el libro International Travel & Health.
MD Travel Health (www.mdtravelhealth.com) Recomendaciones de salud para los viajeros país por país.
Israel tiene hospitales estatales de primer orden por todo el país, además de varios hospitales y clínicas privados. Para más información, véase www.science.co.il/hospitals.asp.asp. Las ciudades grandes de los Territorios Palestinos cuentan con centros hospitalarios de calidad razonable, pero pueden estar abarrotados o carecer de suministros suficientes.
Las farmacias (beit merkach at) son fáciles de encontrar; los farmacéuticos hablan inglés y pueden aconsejar sobre qué medicamento tomar si se describen los síntomas. En las ciudades siempre hay al menos una farmacia de guardia (beit merkachat toran); para más información, llámese al %106 (línea directa municipal) o consúltense los enlaces en www.onlineisrael.info/search-internet/health/city (en hebreo). Algunas sucursales de Super Pharm abren 24 h. En los Territorios Palestinos se recomienda comprobar la fecha de caducidad de los medicamentos.
Si el medicamento se vende solo con receta, lo mejor es llevarlo desde casa junto con una copia de la prescripción por si necesitará más. Advertencia: las farmacias israelíes solo aceptan recetas de médicos israelíes.
Hay clínicas dentales privadas por doquier. La asistencia dental es de calidad, pero no hay que olvidar que el seguro de viaje solo suele cubrir estos tratamientos.
Esta enfermedad, endémica en Israel y los Territorios Palestinos, se transmite por la picadura de un mosquito infectado y provoca un bulto o úlcera que aumenta lentamente en la piel. Puede llegar a provocar fiebres altas muy graves y suele ir acompañada de anemia y pérdida de peso. También son portadores los perros y otros animales, como el damán roquero (Procavia capensis). En lo posible, hay que evitar las picaduras de mosquito.
Desde el 2012, se han confirmado casos de MERS (Síndrome Respiratorio de Oriente Próximo) en la Península Arábiga, Jordania y el Líbano, pero todavía no ha llegado a Israel y los Territorios Palestinos. Los síntomas son fiebre, tos y dificultades respiratorias; la enfermedad se transmite por contacto cercano, por lo que no supone un riesgo para la mayoría de las personas. Casi una tercera parte de los casos confirmados de MERS han resultado en fallecimiento, si bien esas personas tenían alguna enfermedad subyacente. Para más detalles, visítese www.cdc.gov/corona/virus/mers.
Aunque bastante improbable, se aconseja evitar entrar en contacto con perros callejeros y animales salvajes como zorros.
La rabia se transmite por mordiscos o lamidos de un animal infectado en una herida de la piel, y es mortal. Las personas a cargo de animales deben vacunarse, así como los que viajen a zonas remotas donde no exista una fuente fiable de vacunación tras la mordedura en el plazo de 24 h. Se precisan tres inyecciones en un mes o, de no estar vacunado, un tratamiento de cinco inyecciones en el plazo de 24 h o lo antes posible tras el mordisco. La vacuna no inmuniza, pero permite más tiempo para recibir asistencia médica.
Puede ocurrir por un simple cambio de dieta cuando se viaja, de modo que aunque la comida y el agua israelíes son saludables, es posible sentirse descompuesto porque el cuerpo no está acostumbrado a los alimentos y tardará en adaptarse. Hay que tener en cuenta que, en verano, la comida sin refrigerar se estropea pronto, de modo que, en dicha época, se aconseja evitar los cuchitriles que venden shawarma y falafel, pues el hummus se echa a perder con rapidez. Quizá sea más seguro comer hummus en un restaurante con comedor interior. En los Territorios Palestinos hay que ser aún más cauto.
Si se contrae diarrea, hay que beber mucho líquido (no alcohol) o una solución oral que contenga sal y azúcar.
Unas pocas deposiciones no precisan tratamiento, pero si son más de cuatro o cinco al día hay que tomar antibióticos (por lo general un fármaco con quinolona) y un agente antidiarreico (como la loperamida). Si se evacua también sangre, la diarrea persiste más de 72 h o va acompañada de fiebre, escalofríos o dolor abdominal agudo, hay que ir al médico.
El agotamiento por calor es uno de los trastornos más frecuentes entre quienes viajan a Israel y los Territorios Palestinos. Se produce cuando se suda mucho, lo que ocasiona una pérdida excesiva de líquidos y sales.
Es común en los climas cálidos, después de realizar un ejercicio no habitual antes de aclimatarse por completo. Los síntomas son dolor de cabeza, mareo y cansancio. La deshidratación se manifiesta en el momento en que se siente sed; conviene beber agua hasta producir una orina clara y poco densa. El tratamiento para combatirlo consiste en reponer el líquido con agua, zumo de frutas, o ambos, y refrescarse con agua fría y ventiladores. Para tratar la pérdida de sal hay que ingerir líquidos salados en sopa o caldo, y añadir un poco más de sal que la habitual en los alimentos.
El golpe de calor es mucho más grave. Se produce cuando falla el mecanismo corporal de regulación del calor. Un aumento excesivo de la temperatura corporal provoca que el cuerpo deje de sudar, a la vez que se observa un comportamiento irracional e hiperactivo y eventualmente una pérdida de conciencia y puede que la muerte. El tratamiento ideal es enfriar rápidamente el cuerpo rociándolo con agua helada y ventilándolo. También es fundamental reponer líquidos y electrolitos con urgencia por vía intravenosa.
Tal vez no contagien la malaria, pero los mosquitos pueden provocar irritación e infecciones. Los repelentes con DEET previenen las picaduras. Los mosquitos también contagian la fiebre del dengue.
Las abejas y las avispas solo causan problemas reales a los que tienen alergias agudas (anafilaxis). De ser así, conviene llevar una inyección de adrenalina o similar.
El hábitat de los mosquitos son las playas del Mediterráneo. Por lo general solo provocan una picadura desagradable, pero pueden acarrear una rara afección cutánea llamada leishmaniasis.
El número de medusas ha aumentado con los años, a causa de la sobrepesca en el Mediterráneo (los peces comen medusas y, en ausencia de depredadores, estas últimas han aumentado considerablemente). La picadura de la medusa es irritante, pero casi siempre desaparece a los 10-15 min. Una picadura fuerte (o una picadura en la cara o los genitales) precisa la evaluación de un médico.
Los escorpiones suelen vivir en climas áridos y secos y su picadura producir dolor y puede ser muy peligrosa.
Las chinches acostumbran alojarse en los hostales u hoteles baratos. Sus picaduras son muy fuertes y provocan ronchas. Es posible acabar con ellas vaporizando el colchón con un buen insecticida.
La sarna también puede propagarse en los alojamientos baratos. Estos ácaros pequeños viven en la piel, sobre todo entre los dedos. Provocan una erupción que pica mucho. La sarna se trata fácilmente con una loción de venta en farmacias; todos aquellos que hayan estado en contacto con el infectado deben tratarse también, pues podrían ser portadores asintomáticos.
La mayoría de las serpientes que habitan en Israel y los Territorios Palestinos no son venenosas, pero hay excepciones, como la víbora palestina (tzefa; Vipera palaestinae). No hay que caminar descalzo ni meter la mano en agujeros o grietas.
De resultar mordido por una serpiente, es importante no perder la calma. La mitad de las personas mordidas por serpientes venenosas no han resultado envenenadas. Se debe inmovilizar el miembro afectado con una tablilla (o un palo) y aplicar un vendaje fuerte sobre la zona, como si se vendara un esguince (nada de torniquetes ni cortar o chupar el mordisco), y llevar a la víctima a un médico lo antes posible para que le administre un antídoto si es necesario.
En Israel el agua del grifo es potable, si bien puede tener un sabor desagradable (en algunas zonas es algo salada), por lo que muchos israelíes usan filtros o tienen dispensadores de agua mineral en casa. El agua mineral se vende en todas partes. No se debe beber agua de los ríos ni de los lagos, pues pueden contener bacterias o virus que provoquen diarrea o vómitos.
Siempre es buena idea contratar una buena póliza antes de salir de viaje. Además de la habitual cobertura por enfermedad (pasar por urgencias puede salir caro) y robo, conviene asegurarse de que el seguro cubra, si se necesita, necesidades específicas como hacer submarinismo, paracaidismo o esquí. Casi todas las pólizas excluyen la responsabilidad por “acciones de guerra”.
Para estancias de entre tres y seis meses, incluso con visado de turista, se puede conseguir una cobertura médica casi completa a precios razonables en una de las sociedades médicas del país. Para más detalles, visítense las oficinas de:
Maccabi Healthcare Services (073-260 6619; www.maccabi4u.co.il) Más detalles en su programa Well-Come.
Me’uchedet (077-270 3756; www.meuhedet.co.il) Ofrece cobertura con su Foreign Members Plan
Se aconseja consultar la información actualizada sobre alertas y recomendaciones de viaje a Israel y los Territorios Palestinos en el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación:
Antes y durante el viaje recomendamos que cualquier información relacionada con seguridad, salud, trámites administrativos como la expedición de visados, etc. sea verificada con el Ministerio de Asuntos Exteriores del país del viajero.