Deportes y actividades en Argentina

Actividades al aire libre en Argentina

Alpinismo, excursionismo y esquí han sido las actividades clásicas al aire libre en Argentina, pero hoy se practican muchas más: kitesurf en los Andes, parapente en las Sierras Centrales, submarinismo en la costa atlántica y pesca de truchas en la región de los lagos.

Excursionismo y senderismo

En Argentina existen rutas extraordinarias. La región de los lagos es quizá el destino preferido para practicar excursionismo, con excelentes caminatas de uno o varios días en parques nacionales, como los de Nahuel Huapi y Lanín. Para explorar el primero, conviene establecer la base en Bariloche; para el segundo, es mejor San Martín de los Andes.

Las rutas por los Andes patagónicos son fantásticas. Al sur de Bariloche está El Bolsón, práctica base para explorar tanto los bosques próximos como el cercano Parque Nacional Lago Puelo. El Parque Nacional Los Glaciares ofrece recorridos magníficos por el cerro Fitz Roy y sus estribaciones. Para visitarlo, se puede permanecer en El Chaltén y esperar (en la cervecería) a que amainen las tormentas.

En el Parque Nacional Torres del Paine (Chile), cerca de El Calafate (Argentina), las caminatas son espectaculares. Por Tierra del Fuego también hay buenas rutas, sobre todo en el Parque Nacional Tierra del Fuego.

También se pueden visitar los altos picos andinos al oeste de Mendoza. A pesar de que esta zona es más popular para la práctica del montañismo, se puede practicar buen senderismo, así como en los Andes septentrionales, en las inmediaciones de la quebrada de Humahuaca.

En Bariloche, Ushuaia, El Bolsón y Junín de los Andes hay sedes del Club Andino, asociación de excursionismo y montañismo que facilita mapas e información de todo tipo, incluso las condiciones de las rutas.

Montañismo

Los Andes son el sueño de cualquier montañero, especialmente en las provincias de San Juan y Mendoza, donde se alzan algunos de los picos más altos del hemisferio occidental. Aunque el ascenso más famoso es el del Aconcagua, la cumbre más alta de América, hay muchas otras en los Andes, algunas mucho más técnicas e interesantes. Cerca de Barreal, el Cordón de la Ramada tiene cinco picos de más de 6000 m, entre los que se encuentra el gigantesco cerro Mercedario, de 6770 m. La región está menos saturada que la del Aconcagua, ofrece ascensos más técnicos y muchos montañeros la prefieren. Cerca de allí también se halla la majestuosa cordillera de Ansilta, con siete picos que arañan el cielo con altitudes de entre 5130 y 5885 m.

El magnífico y exigente Fitz Roy, al sur de la Patagonia y cerca de El Chaltén, es uno de los mejores destinos del mundo, mientras que las montañas del Parque Nacional Nahuel Huapi ofrecen diversión para todos los niveles.

Escalada en roca

El Parque Nacional Los Glaciares de la Patagonia, donde se hallan el cerro Torre y el Fitz Roy, es uno de los lugares más importantes del mundo para practicar escalada; la del cerro Torre se considera una de las más duras del planeta; si no se tienen el tiempo o la experiencia para acometerlo, hay muchas otras opciones. La cercana localidad de El Chaltén es un refugio de escaladores; muchas tiendas imparten clases y alquilan equipos.

Los Gigantes, en las Sierras Centrales, se está convirtiendo en la capital de la escalada, con multitud de rutas de gran calidad. También se puede escalar en torno a La Carolina.

En la provincia de Mendoza, Los Molles es un lugar pequeño y agradable para la escalada, que también puede practicarse en el cercano Chigüido (cerca de Malargüe), así como en Los Arenales y El Salto, en las inmediaciones de Mendoza.

También se escala en Bariloche, especialmente en el cerro Catedral, y en La Pampa, en Tandil y en Mar del Plata.

Pesca

La Patagonia y la región de los lagos son importantes destinos mundiales para pescar con mosca, ya que las especies de truchas introducidas (común, de arroyo, de lago y arcoíris) y los salmones atlánticos alcanzan proporciones enormes en los gélidos ríos que recorren paisajes espectaculares. Es el paraíso de los pescadores.

En la región de los lagos, Junín de los Andes se ha autoproclamado la capital argentina de la trucha, por lo que es muy fácil encontrar un guía para ir a los fantásticos arroyos del Parque Nacional Lanín. La cercana Aluminé se asienta en la ribera del río homónimo, una de las corrientes trucheras más demandadas. También son ideales Bariloche y Villa la Angostura.

La localidad de Río Grande, en Tierra del Fuego, es famosa por la pesca con mosca. El río epónimo alberga algunas de las truchas marrones más grandes del mundo.

En Camarones y Puerto Deseado se puede practicar la pesca de altura; cerca de Gobernador Gregores hay un lago donde capturar salmones y truchas.

En el noreste subtropical, el caudaloso río Paraná atrae a todo tipo de aficionados del mundo entero, que consiguen enormes especies fluviales como el surubí y el dorado, un pez similar a la trucha que no debe confundirse con el mahi-mahi de agua salada, pero tan potente nadador que su captura resulta muy emocionante.

Guías y servicios

En localidades más pequeñas, como Junín de los Andes, se puede ir a la oficina de turismo y pedir una lista de los guías u operadores locales. Los pescadores independientes que se dirijan a la región de los lagos tienen la opción de contactar con la Asociación de Guías Profesionales de Pesca Parque Nacional Nahuel Huapi y Patagonia Norte (www.guiaspatagonicos.com.ar), que dispone de un listado y datos de contacto de guías con licencia para trabajar en la Patagonia septentrional y los lagos.

Para más información, se recomienda contactar con la Asociación Argentina de Pesca con Mosca (www.aapm.org.ar).

Muchos pescadores contratan circuitos a través de agencias de fuera de Argentina.

Normativa

En la región de los lagos y la Patagonia, la temporada va de noviembre a abril o mayo; en el noreste, de febrero a octubre. Ciertos lagos y cursos ubicados en propiedades privadas pueden permanecer abiertos más tiempo.

Para la pesca de la trucha es casi siempre obligatorio atrapar y soltar. En la Patagonia (incluida la región de los lagos), las especies autóctonas siempre deben ser devueltas al agua; suelen ser más pequeñas que la trucha y entre ellas se cuentan la perca, el puyen (un pez alargado natural del hemisferio sur), el pejerrey patagónico y la rara peladilla.

Las licencias de pesca son obligatorias en todas partes; se pueden conseguir en las tiendas especializadas, en los clubes de caza y pesca y, a veces, en oficinas de turismo y gasolineras.

Esquí y ‘snowboard’

Las montañas argentinas ofrecen excelentes opciones de esquí, buena nieve en polvo y muchos días de sol. La mayoría de los sitios posee nieve fabulosa y buenas infraestructuras. En algunas estaciones más antiguas, el equipo puede estar algo anticuado pero, en general, la calidad del esquí lo compensa.

Existen tres zonas principales para la práctica de deportes de nieve: Mendoza, la región de los lagos y Ushuaia. En Mendoza se encuentra la principal estación de esquí del país, Las Leñas, con la mejor nieve y las pistas más largas; el resort Los Penitentes también está cerca. En la zona de los lagos hay varias estaciones más sencillas, como las del cerro Catedral, cerca de Bariloche, y el Chapelco, cerca de San Martín de los Andes; aunque su nieve es menos fina, las vistas son mucho mejores que en Las Leñas. Por su parte, Esquel, que se adentra en la Patagonia, ofrece excelente nieve en polvo en La Hoya.

La estación más meridional del mundo está próxima a Ushuaia. En casi todas partes, la mejor época para esquiar suele ir de mediados de junio a mediados de octubre.

Ciclismo

Es una actividad muy popular y, a pesar de la ausencia de carriles-bici, es muy común ver ciclistas en muchas carreteras. Algunas rutas asfaltadas son excelentes, especialmente en la región de los lagos y, en menor grado, en el noroeste andino.

En el noroeste existen varias rutas por carretera excelentes, como la de Tucumán a Tafí del Valle, la directa de Salta a Jujuy y, la más espectacular, la que sigue la RN 68 hasta la quebrada de Cafayate. Las Sierras Centrales también son ideales para recorrer en bicicleta y la mayor parte de la red de carreteras asfaltadas discurre por amplios valles. En Mendoza se encuentran algunas de las mejores rutas a través de los Andes, pero en general solo son aptas para ciclistas expertos. Los menos preparados pueden entrenarse pedaleando entre viñedos en Maipú.

En el Parque Nacional Nahuel Huapi, en la región de los lagos, hay excelentes circuitos, entre ellos el Circuito Chico, que bordea fabulosos lagos y permite ver algunos de los paisajes más bonitos de la Patagonia. Algunos ciclistas emprenden con sus bicicletas el Cruce de Lagos, una famosa travesía de dos días en barco y autobús que cruza los Andes hasta Chile.

La Patagonia es un popular y mítico destino, con bonitos y desolados paisajes y un cielo infinito. Sin embargo, hay fuertes vientos multidireccionales y escabrosas carreteras de grava, y se debe llevar ropa para todo tipo de clima, incluso en verano, cuando los días son largos y el tiempo es relativamente templado. La RN 40 es dura debido a los vientos y la escasez de agua; muchos ciclistas alternan secciones de esta vía con la Carretera Austral chilena.

En los últimos años, Buenos Aires se ha hecho algo más apta para el ciclismo, gracias al aumento de los carriles exclusivos para bicicletas y a un sistema gratuito de bicicletas compartidas. Mendoza y Córdoba también cuentan con algunos carriles especiales para bicis.

Bicicleta de montaña

Su práctica está poco desarrollada y hay pocos sitios con auténticas pistas para el ciclismo de montaña. Sin embargo, en los grandes centros de actividades al aire libre, como Bariloche, se puede alquilar una bicicleta para realizar una excursión por cuenta propia o una salida guiada.

Algunos buenos lugares donde alquilan bicicletas de montaña son San Martín de los Andes, Villa la Angostura, Bariloche y El Bolsón en la región de los lagos; Esquel en la Patagonia; Mendoza y Uspallata en la provincia de Mendoza; Barreal en la provincia de San Juan; Tilcara en el noroeste andino, y Tandil en la provincia de La Pampa.

‘Rafting’ y kayak

En la actualidad, los ríos Mendoza y Diamante, en la provincia de Mendoza, son los reyes de los destinos de aguas bravas, aunque el Juramento, cerca de Salta, también resulta emocionante.

Si lo que uno desea son paisajes de infarto, se impone dirigirse a la Patagonia. Los ríos Hua Hum y Meliquina, cerca de San Martín de los Andes, y el Limay y el Manso, cerca de Bariloche, son espectaculares, igual que el Aluminé. Desde la localidad patagónica de Esquel se puede descender el río Corcovado, de aguas glaciales y magnífica belleza. Un destino poco conocido para la práctica del rafting es Barreal, aunque su atractivo radica más en el impresionante paisaje andino que en sus rápidos. En casi todos estos ríos se pueden realizar descensos panorámicos de clases II y III; para los de clase IV hay que dirigirse a los ríos Mendoza, Diamante, Meliquina, Hua Hum y Corcovado. Normalmente no es necesario tener experiencia si se va con guías.

En muchos de los ríos mencionados se puede remar en kayak, así como en Ushuaia, El Chaltén, Viedma, Puerto Madryn, Paraná, Rosario y Salta. Los aficionados al kayak de mar tienen opciones en el río Deseado y en la estancia de Bahía Bustamante.

Parapente y paracaidismo

Como el parapente es una actividad muy popular, realizar vuelos en tándem o tomar clases resulta muy fácil y hay magníficos lugares para hacerlo. Muchas agencias de Bariloche lo ofrecen. Tucumán es un famoso destino para este deporte, aunque en Salta, La Rioja y Merlo también se puede volar por el noroeste andino o cerca de allí. El mejor lugar quizá sea La Cumbre, en las Sierras Centrales de Córdoba; también es un lugar estupendo para el paracaidismo.

 

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