Información y Consejos de Salud para ir a Mallorca

Mallorca no presenta riesgos sanitarios; como mucho, uno puede sufrir quemaduras de sol, picaduras de insectos, leves problemas estomacales y resacas. El agua del grifo es potable, pero a menudo sabe mal debido al alto nivel de sodio o cloro; se puede comprar agua embotellada en muchos sitios.

Antes de partir a Mallorca

Seguro

Los ciudadanos de la UE deberían solicitar una Tarjeta Sanitaria Europea en su centro de salud. Esta tarjeta cubre la mayor parte de los cuidados médicos que puedan precisar, excepto los casos no urgentes y la repatriación de emergencia. Los ciudadanos de otros países deberían averiguar si hay un acuerdo común entre su país y España para recibir asistencia sanitaria gratuita.

Vacunas recomendadas

No hay que ponerse ninguna vacuna específica para ir a Mallorca, pero la Organización Mundial de la Salud recomienda que todos los viajeros estén vacunados contra la difteria, el tétanos, el sarampión, las paperas, la rubeola y la polio, independientemente de su destino.

En Mallorca

Asistencia médica

• Si se necesita una ambulancia, hay que llamar al 061, y para recibir tratamiento urgente, acudir a la sección de urgencias del hospital más cercano. En la isla, el principal es el Hospital Universitari Son Espases (871 205000; www.hospitalsonespases.es; ctra. de Valldemossa 79), en Palma, pero hay otros importantes en Inca y Manacor.
• En los centros turísticos costeros relevantes suele haber clínicas.
• Las farmacias ofrecen consejo y venden algunos medicamentos sin receta; si una está cerrada, en su puerta aparece colgado el nombre de la farmacia de guardia más cercana.

Riesgos específicos

• La deshidratación se produce tras una pérdida excesiva de líquidos. Dolor de cabeza, mareos y cansancio son algunos de sus síntomas. Hay que beber mucha agua y/o zumo.
• La insolación es mucho más grave, pues provoca un comportamiento irracional e hiperactivo y, en algunos casos, la pérdida de conciencia y la muerte. Lo ideal es refrescar rápidamente el cuerpo rociándolo con agua y abanicándolo.
• Quienes padezcan alergia severa a las picaduras de abeja y avispa deben llevar consigo una inyección de EpiPen o una similar de adrenalina.
• En las zonas boscosas hay que estar atento a las orugas peludas de la procesionaria del pino; el contacto de la piel con el pelo marrón rojizo provoca una alergia muy irritante. 
• Algunos ciempiés españoles tienen una picadura muy desagradable, pero no letal. Los más peligrosos son los que tienen segmentos claramente definidos, como por ejemplo rayas negras y amarillas.
• En verano puede haber medusas en las playas. Vinagre, hielo y sales de Epsom pueden aliviar el dolor de la picadura. De lo contrario, hay que frotarse con agua salada; el agua dulce puede avivar el dolor. En caso de picadura, lo mejor es dirigirse al puesto de la Cruz Roja (suelen prestar servicio en las playas principales).
• En muchas playas mallorquinas hay moscas de arena (flebótomos). Normalmente solo causan un molesto picor, pero en ocasiones pueden provocar un raro trastorno de la piel llamado leishmaniasis cutánea en el lugar de la picadura, que puede dejar cicatrices atróficas.

Seguro de viaje a Mallorca

• Se recomienda hacerse un seguro de viaje que cubra robos, pérdidas, problemas médicos y cancelaciones.
• Hay que leer la letra pequeña, ya que algunas pólizas excluyen las actividades denominadas "de alto riesgo", como el submarinismo y el barranquismo.
• Los ciudadanos de la UE tienen derecho a asistencia sanitaria en los hospitales públicos (hay que presentar la tarjeta sanitaria europea).
• Hay que comprobar que la póliza cubre las ambulancias o un vuelo de urgencia al país de origen.
• Es preciso conservar todos los documentos y facturas por si hay que reclamar al seguro.

Informarse es importante

Antes y durante el viaje recomendamos que cualquier información relacionada con seguridad, salud, trámites administrativos como la expedición de visados, etc. sea verificada con el Ministerio de Asuntos Exteriores del país del viajero.