La ruta de las especias, un viaje cargado de espectacularidad
Cargada con toda la espectacularidad y el misterio del mundo antiguo, la ruta de las especias se abrió paso a través de Indonesia, Malasia, Sri Lanka, India, Ghana, Iraq, Egipto e Italia, transportando especias de Oriente al mundo árabe, romano, egipcio y griego.
Antiguamente, el comercio de especias resultaba altamente lucrativo, un negocio de transporte y comercialización de grandes cantidades de especias, productos como el incienso y drogas como el opio. Entre las especias figuraban la canela, el cardamomo, el jengibre y la cúrcuma; las dos primeras llegaban de Oriente Medio desde el 2000 a.C. Los comerciantes y mercaderes árabes transmitieron increíbles leyendas sobre las especias para incrementar su mística y atractivo, y por tanto su margen comercial. Alejandría también formaba parte del engranaje. Cuando los romanos empezaron a viajar de Egipto a la India, transformaron Alejandría en uno de los centros comerciales más poderosos del mundo, desde donde se distribuían las especias indias a los mercados de Grecia y Roma.
Jardín de especias, Sri Lanka © Dan Lundberg - www.flickr.com/photos/9508280@N07/25770737285
El transporte desde las regiones especieras hasta las tierras árabes se realizaba principalmente por mar, como en el Asia oriental, en que los chinos viajaban a las islas de las Especias (islas Molucas, Indonesia) y Ceilán (Sri Lanka). En la Edad Media también llegaron los europeos. Con barcos más avanzados y una tecnología de la navegación nueva, podían cruzar océanos en busca de riqueza, y nada era más atractivo que las especias mágicas. Los portugueses llegaron en el s. XVI en busca de tres pequeños productos: clavo, nuez moscada y macia, todos de las islas Molucas, las islas de las Especias, al este de Indonesia, y de gran demanda porque daban un sabor distinto a la comida y porque se suponía que la nuez moscada curaba la peste.
Los mercaderes holandeses zarparon para las islas de las Especias en 1595 y 1598, y en ambas expediciones regresaron con lucrativas cargas, lo que llevó a la formación de la Compañía Holandesa de las Indias Orientales en 1602. En 1664 se formó la Compañía Francesa de las Indias Orientales, con la que Portugal empezó a ser desplazado de la región que había dominado durante un siglo. En el s. XIX los británicos sometieron a la India y Ceilán, y los holandeses consiguieron controlar las Indias Orientales.
El viaje hoy
Islas de las Especias, Indonesia © Matiinu Iman Ramadhan - www.flickr.com/photos/matiinu/15919800990
Las islas Molucas están protegidas del turismo masivo por la ‘tiranía’ de la distancia, lo errático del transporte y los residuos de un breve pero destructivo período de conflictos que va de 1999 al 2002. Pero eso beneficia al turista individual, que encuentra allí lo que el dinero no puede comprar: islas idílicas, una cultura encantadora y hospitalaria, magníficas posibilidades para el buceo, playas paradisíacas...
Sin embargo, los atractivos son una cosa y la historia otra. Si se desea seguir el camino de la ruta de las especias original hay que dirigirse a la región de Banda, un diminuto pero fascinante ramillete de 10 islas y quizá el destino más tentador de las Molucas. En la Edad Media la nuez moscada era prácticamente exclusiva de Banda, y su precio era muy alto. Se intercambiaba por comida y ropa a los mercaderes árabes, chinos, javaneses y bugis, pero cuando llegaron los europeos (portugueses en 1512 y holandeses desde 1599), las cosas cambiaron muy rápidamente, ya que los recién llegados exigían un monopolio comercial agobiante: cuando los bandaneses empezaron a comerciar con los ingleses, el gobernador general de la Compañía Holandesa de las Indias Orientales en 1621 ordenó el genocidio de prácticamente todos los indígenas.
El viajero reflexiona sobre tan trágica historia al adentrarse por las calles de Bandaneira, llenas de flores, casas de la era colonial, ruinas y maravillosos cielos sobre Gunung Api. Pero su trágico pasado no puede empañar este maravilloso lugar. Esa sensación de euforia crece al tomar la lancha a las islas Kei para descubrir un destino de playas de arena blanca.
Isla Pulau Tidore, islas de las Especias, Indonesia © Fabio Achilli - www.flickr.com/photos/travelourplanet/15013115470
Atajo
En las islas de las Especias, aparte de los lugares ya mencionados, son de interés Ohoidertawun o Pasir Panjang, con la más pura arena blanca; contemplar la puesta de sol que se extiende desde Pulau Ternate hasta el cono volcánico cubierto de selva del vecino Pulau Tidore, y descubrir las playas idílicas en las islas desiertas de los alrededores de Morotai.
Desvío
En la Edad Media, antes del auge de Portugal y Holanda, Venecia era la potencia más importante en el comercio de las especias. Esto tuvo repercusiones en la comida italiana. Una vez que los italianos de las clases bajas conocieron lo que se cocinaba en los hogares nobles, sintieron menos entusiasmo por sus sospechosas carnes y panes sin sal. El comercio marítimo y las abundantes cosechas de los ss. XI al XIII cubrieron sus necesidades básicas, lo que permitió a los italianos dar rienda suelta a su creatividad con carnes curadas, quesos añejos y vinos especializados.
Experiencias únicas
• Visitar las islas de las Especias en Indonesia.
• Viajar a Malaca (Malasia), una de las paradas más importantes de la ruta de las especias en Asia y actualmente un destino fabuloso por sus tesoros históricos y su rica esencia.
• Visitar un jardín de especias en Sri Lanka para descubrir usos alternativos de las especias más conocidas.
• Acercarse a los extraordinarios fuertes costeros de Ghana, construidos originalmente como puestos comerciales para almacenar mercancías.
• Imaginarse como un mercader en las antiguas callejuelas de Al-Quseir, en Egipto.
- DISTANCIA - 12 000 KM APROX.
- PAÍSES - INDONESIA, MALASIA, SRI LANKA, INDIA, GHANA, IRAQ Y EGIPTO
- DURACIÓN IDEAL - TANTO TIEMPO COMO SEA POSIBLE
- MEJOR ÉPOCA - CUALQUIERA