Barrio

Kungsholmen

Hasta hace poco era una joya subestimada, sobre todo entre los visitantes, pero cada vez adquiere más fuerza. Es un tranquilo barrio residencial que se explora mejor a pie, con fantásticos sitios para comer, parques perfectos para niños y un larguísimo paseo con árboles junto al agua. También posee uno de los edificios más importantes de Estocolmo, el Stadshuset (ayuntamiento).

Lo mejor en un día

Se empieza el día con un paseo junto al agua hasta el Stadshuset para visitarlo, sin olvidar la torre.

El mediodía se recomienda dedicarlo a pasear por la zona de Scheelegatan y Hantverkargatan y buscar un buen sitio para almorzar. Hay donde escoger, pues en el barrio abundan los restaurantes. Bergamott es una fantástica opción. También se puede pasar el rato mirando escaparates.

Después, se puede pasear al (lado del agua siguiendo Norr Mälarstrand. Al regresar se hace un alto para beber algo tranquilamente y cenar en el restaurante flotante Mälarpaviljongen. El Lemon Bar, un tranquilo bar de barrio, es ideal para una última copa.