Las mejores experiencias en la costa de Georgia, Estados Unidos

Escrito por
Masovaida Morgan, editora de Lonely Planet

2 Junio 2017
7 min de lectura
© Natalia Bratslavsky / Getty Images
Savannah, Georgia, EE UU

Descubrir la costa de Georgia, EE UU y las panorámicas islas barrera

Si el viajero tiene a Georgia en mente, quizá sea por la dinámica cultura de Atlanta, la capital, o por los robles llenos de musgo español que dibujan vertiginosas sombras sobre la evocadora Savannah. Pero hay islas menos conocidas que se extienden más allá de la Hostess City del sur, y son la melodía más antigua y dulce de este estado.

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Destino costa este de Estados Unidos

 

Las islas barrera de la costa de Georgia constituyen un tercio de las marismas salinas de la costa Este y se extienden 240 km por la costa del Atlántico, empezando por Tybee Island, la más septentrional, a 30 minutos en automóvil desde Savannah, hasta Cumberland Island, sobre la frontera con Florida. Visitar algunas de estas islas puede ser tan sencillo como hacer escala durante un recorrido por la I-95, pero otras exigen un desplazamiento más intrépido por el mar. 

Esta ristra semitropical de islas ofrece un montón de oportunidades para disfrutar del paisaje a ritmo tranquilo; al fin y al cabo son islas, y están en el sur. Si bien el nivel de urbanización varía de isla en isla, encontrar naturaleza en cada una de ellas es una buena forma de disfrutar un poco la soledad.

 

1. Tybee Island: el enclave diferente de Savannah

Veinte millas al este del barrio histórico de Savannah, Tybee Island (conocida por los lugareños, o al menos por los que viven en el continente, como ‘Savannah Beach’) tiene 8 km de costa pública fácilmente accesible, popular entre visitantes de otras partes de Georgia y más allá.

 

Costa de Georgia, Tybee Island, EE UU © AppalachianViews / Getty Images

Tybee Island, Costa de Georgia, EE UU © AppalachianViews / Getty Images 

 

Se puede disfrutar del surf, el kayak, el surf de remo o las motos de agua, con material propio o alquilado en un operador local. El animado muelle del extremo sur de la isla es popular para ir de pícnic y ver pasar a la gente; pero si al viajero le gusta más observar aves y delfines que personas, que vaya a North Beach, cerca de Strand Avenue. Allí también encontrará el faro más alto del estado.

Si busca soledad y se siente aventurero, puede ir de excursión a Little Tybee Island. Se halla deshabitada y es perfecta para acampar, pasear por la playa e ir de excursión. No está lejos de la ‘gran’ Tybee, parece lo suficiente cerca como para llegar nadando, pero las corrientes son traicioneras, así que mejor no intentarlo. Se puede ir en kayak, pero solo si se tiene experiencia, o con servicios chárter de barco.

 

2. McQueen's Island Trail: pasear por una antigua vía de tren

La McQueen's Island Trail es un éxito entre los viajeros fans de las bicicletas (hay que llevar la bicicleta), el excursionismo o el running, ya que sigue lo que antaño era un tramo de la Savannah & Atlantic Railroad Line. La ruta panorámica de 9,5 km está rodeada de spartina, palmas de abanico y cedros de costa. El terreno varía de tierra dura a suelo de guijarros calizos, y el tramo oeste de la ruta tuvo que ser restaurado hace poco por la erosión, así que hay que tratar con cuidado este frágil terreno.

 

Costa de Georgia, McQueen's Island, EE UU © Jason A G / www.flickr.com/photos/greerjasona/9686319721

McQueen's Island, Costa de Georgia, EE UU © Jason A G / www.flickr.com/photos/greerjasona/9686319721 

 

Paralela al río Savannah, la ruta pasa por orillas pantanosas en algunos puntos. Hay excelentes zonas de descanso donde respirar hondo la brisa marina y admirar la impresionante amplitud del río y los enormes barcos que se dirigen al mar. Se ven animales locales como delfines, tortugas, algún lince y algún caimán. Al final de la ruta hay algún detalle de estilo kitsch isleño, como un roble adornado con boyas, banderas y otros ornamentos. El comienzo de la ruta está cerca de la US Highway 80, 24 km al este de Savannah; hay estar atento para ver el cartel del Fort Pulaski National Monument y aparcar junto a la carretera o en el fuerte, es gratis. Los únicos animales permitidos en la zona son los que la habitan, conviene dejar a la mascota en casa.

 

3.Odiseas isleñas remotas

En dirección sur se descubren las islas que escapan del radar, a la sombra de Tybee, St Simons o Jekyll. Llegar a estos remotos tesoros naturales requiere un mayor esfuerzo, pero su belleza intacta y prístina merece la caminata.

 

Costa de Georgia, Wassaw Island, EE UU © Bruce Tuten / www.flickr.com/photos/savannahgrandfather/18116583003

Wassaw Island, Costa de Georgia, EE UU © Bruce Tuten / www.flickr.com/photos/savannahgrandfather/18116583003

 

Un ejemplo es Wassaw Island. Todo lo que le falta a nivel de desarrollo lo compensa con su majestuosidad primitiva, que se percibe yendo de excursión a pie o en bicicleta por sus 32 km de senderos y 11 km de costa, y también observando aves. Los visitantes pueden contemplar fauna diversa en su hábitat todo el año, y la normativa de refugio nacional asegura la protección de todas las especies.

Los robles y los pinos ellioti convergen en doseles arbóreos donde viven colonias de garzas, garcetas y otras aves locales, y tortugas amenazadas llegan la costa para desovar en las noches de verano. Para respetar la rica naturaleza de esta isla hay que seguir las indicaciones y no aventurarse en las zonas de acceso restringido. Wassaw abre cada día, del alba a la puesta del sol, y solo es accesible en barco. Se pueden reservar servicios chárter con operadores eco-conscientes como Savannah Coastal EcoTours o Wilderness Southeast.

 

Costa de Georgia, Sapelo Island, EE UU © lns1122 / www.flickr.com/photos/minijoegreen/11474450116

Sapelo Island, Costa de Georgia, EE UU © lns1122 / www.flickr.com/photos/minijoegreen/11474450116

 

Sapelo Island está en el centro de las islas barrera de Georgia, y es una visita ideal para los fans más acérrimos de la naturaleza. Los circuitos por la extensa red de estuarios de la isla se reservan con antelación a través del Sapelo Island National Estuarine Research Reserve (SINERR) Visitors Center; y hay un servicio de ferri desde la ciudad de Meridian, en el continente, accesible desde la I-95. Es posible acampar en grupos de 15-25 personas en la cercana Cabretta Island. 

Además de científicos e investigadores, los únicos residentes de Sapelo viven en la comunidad de Hogg Hummock. Ellos son el único colectivo restante de los pueblos gullah y geechee, descendientes directos de los esclavos de África occidental trasladados a esta región en 1802. Este grupo permanente, de unas 50 personas, conserva con orgullo su cultura, su lengua y sus tradiciones a pesar de que cada vez son menos.

 

4. The Golden Isles: un refugio más allá de los resorts

A medio camino entre Savannah y Jacksonville se hallan las populares Golden Isles, llamadas así por los exploradores españoles que buscaban oro hace 400 años. Aunque son populares por sus resorts, sus exclusivas comunidades residenciales y algunos de los mejores campos de golf del estado, tienen alternativas para disfrutar de toda su belleza natural.

 

Costa de Georgia, Golden Isles, St Simons, EE UU © BeachcottagePhotography / Getty Images

Golden Isles, St Simons Island, Costa de Georgia, EE UU © BeachcottagePhotography / Getty Images 

 

Al ser la isla más urbanizada de las Golden Isles, St Simons Island tiene una amplia oferta de actividades. Aunque la mitad de la isla la ocupan resorts y áreas residenciales, el agua es excelente; y desde Massengale Park se accede a East Beach, la mejor playa de la isla. Destacan el kayak por marismas serenas, las rutas en bicicleta por la costa, y el surf o el surf de remo. Barry’s Beach Service ofrece circuitos y alquila material.

Jekyll Island, con 16 km de bellas playas y frondosos bosques privados, fue antaño la principal isla privada de la elite de América. El enorme resort Jekyll Island Club, de la época victoriana, es un selecto vestigio de aquel pasado, pero el 65 % de la isla está sin urbanizar, y el Jekyll Island Campground es ideal para dormir bajo las estrellas. Si se madruga se verá el alba en Driftwood Beach; las ramas desnudas de los árboles lavados por el mar crean curiosas siluetas que se perfilan ante la salida del sol, ofreciendo un ambiente casi prehistórico.

 

5. Cumberland Island: relajarse en un remoto esplendor

La ristra de islas termina con la más grande, Cumberland Island, la más bonita del baile, pero un poco tímida; es el paradigma de la soledad prístina gracias a su designación como National Park. Solo es accesible en ferri desde la lánguida ciudad de St Mary’s. Es buena idea reservar con antelación, y todos los pasajeros deben presentarse 30 minutos antes del embarque. No hay tiendas ni papeleras en la isla, así que hay que llevar consigo las provisiones y cargar la basura de vuelta al continente.

 

Costa de Georgia, Cumberland Island, EE UU © BeachcottagePhotography / Getty Images

Cumberland Island, Costa de Georgia, EE UU © BeachcottagePhotography / Getty Images 

 

Se puede pasear entre los majestuosos robles de Sea Camp Campground y explorar las evocadoras Dungeness Ruins, la abandonada mansión de invierno que fue propiedad de los Carnegie. Uno podrá empaparse de sol a lo largo de 28 km de bella costa, donde el viajero se sentirá como el único ser vivo; excepto por la compañía de algunos caballos salvajes.

 

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