Descubre los espectaculares paisajes pirenaicos
Los Pirineos separan y a la vez unen Francia y España, desde el Cap de Creus, en el Mediterráneo, hasta la cordillera Cantábrica. Más de 430 kilómetros de valles espectaculares, montañas grandiosas, lagos glaciares y todo tipo de rutas para hacer senderismo o montañismo. El mundo pirenaico es único, con bosques llenos de leyendas, balnearios en los que nació el turismo de montaña o preciosos pueblos e iglesias medievales.
Estas son algunas de las experiencias que te enamorarán de los Pirineos.
Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
Es el segundo parque nacional de Europa por antigüedad y uno de los lugares más deseados por los montañeros. Lo rodean cuatro impresionantes valles glaciares y está cruzado por todo tipo de rutas que llevan a lugares mágicos como la cascada de la Cola de Caballo, los Llanos de la Larri, el cañón de Añisclo o la garganta de Escuaín. Preside el conjunto el Monte Perdido que, con sus 3355 m de altura, es la montaña de roca caliza más alta del continente.
Al parque solo pueden acceder 1800 personas al día, por lo que conviene reservar con tiempo. Se accede desde varios puntos, pero el principal es Torla, en el valle de Ordesa. https://www.aragon.es/-/parque-nacional-de-ordesa-y-monte-perdido
Parc Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici
Los ríos, las cascadas y hasta 200 lagos son el corazón de este parque nacional catalán que se extiende entre las comarcas de Val d’Aran, Alta Ribagorça y Pallars Sobirà, y ocupa el centro de una enorme reserva natural protegida. El Estany de Sant Maurici y el Estany Long, epicentro del parque, están situados en el fondo de sendos valles y de los que parten numerosos senderos para recorrer el parque. Su rica fauna y flora y sus extraordinarias formaciones geológicas atraen a miles de visitantes amantes del senderismo, el alpinismo y la bicicleta de montaña. http://parcsnaturals.gencat.cat/es/xarxa-de-parcs/aiguestortes
El románico de la Vall de Boí
Este pequeño valle concentra un impresionante patrimonio medieval. Sus nueve iglesias románicas son Patrimonio Mundial, con sus altos campanarios y sus espectaculares pinturas murales, cuyos originales se exponen en el MNAC, en Barcelona. Una de las iglesias más destacadas es la de Sant Climent de Taüll, con unas impresionantes pinturas murales del s. XII, presididas por el célebre pantocrátor que se ha convertido en el icono de la Vall de Boí. www.vallboi.cat
Parque Natural de Posets-Maladeta
El Aneto, la cumbre más alta de los Pirineos, con sus 3404 m, corona el Parque Natural de Posets-Maladeta, en el Pirineo aragonés. El valle de Benasque divide los dos macizos -el de Posets, al oeste, y el de Maladeta, al este- y es el destino cada año de miles de amantes de la naturaleza que descubren sus lagos glaciares y otras maravillas, como el ibón de Coll de Toro o el Forau de Aiguallut. www.aragon.es/-/parque-natural-de-posets-maladeta
Transpirenaica
Considerada como una de las rutas de senderismo más bellas y desafiantes de Europa, la Transpirenaica atraviesa de oeste a este –o viceversa– la cordillera que marca el límite natural y administrativo entre España y Francia, pasando por cuatro comunidades autonómicas y con un largo tramo que discurre por Andorra.
Aguas bravas en el Noguera Pallaresa
Llavorsí es la capital del rafting en los Pirineos. El Noguera Pallaresa ha desarrollado un intenso turismo de aventura en aguas bravas, para todos los niveles y con una enorme variedad de deportes al aire libre, aunque el más popular es el rafting clásico. Los que prefieran algo más novedoso, pueden probar el bus-bop, una embarcación neumática alargada donde los tripulantes van uno detrás de otro y sin sujeción: el chapuzón está casi garantizado.
Ruta de los Cátaros
Esta ruta es uno de los senderos de gran recorrido (GR367) que cruza el Pirineo francés. Parte de Foix hasta llegar a Port-la Nouvelle, en Aude. Son casi 250 km que pueden completarse en 12 etapas, pasando por castillos encaramados en lo alto de las rocas, como Roquefixade, Montségur, Puilaurens, Peyrepertuse, Quéribus o Aguilar. Estos castillos fueron los refugios de la secta herética de los cátaros, que la iglesia persiguió hasta su violenta desaparición a manos de los cruzados en el s. XIII. www.lesentiercathare.com
Roncesvalles
Es un hito del Camino de Santiago, a 790 km del destino final. Con su espectacular colegiata, Roncesvalles es un lugar cargado de simbolismo y de historia. Fue fundado como hospital de peregrinos y desde la Edad Media ha servido de parada para miles de caminantes que, ocho siglos después, continúan llegando, no solo para continuar la ruta jacobea, sino también para hacer alguna de las infinitas rutas de senderismo o de bicicleta de montaña por los alrededores. www.roncesvalles.es
Selva de Irati
El bosque de Irati se extiende por el Pirineo navarro y cruza la frontera francesa, regado por el río homónimo. Ubicado entre los pueblos de Otsagabia/Ochagavía y Orbaizeta, es el segundo hayedo más extenso de España y el segundo de Europa. El mejor momento para visitarlo es el otoño, cuando las hojas adquieren muchas tonalidades que cambian día a día. Aunque no se paga entrada, para visitar Irati solo hay dos accesos permitidos, en Ochagavía y en Orbaizeta. Una vez dentro nos esperan hasta 400 km de senderos para escoger. https://selvadeirati.es
Monasterio de Santa Maria de Ripoll
Es este uno de los grandes símbolos del románico pirenaico y también de Cataluña: el monasterio de Santa María de Ripoll y, en su día, uno de los más importantes centros culturales de Europa. Todavía hoy sorprende su claustro, y su espectacular portada románica, esculpida a mediados del s. XIII con tal cantidad de escenas bíblicas que se la conoce como la “Biblia de piedra”. En su interior reposan los restos de los condes de Besalú y los primeros condes de Barcelona, desde Wifredo el Velloso a Ramón Berenguer IV. www.monestirderipoll.cat
Jaca y San Juan de la Peña
Jaca es la gran capital histórica de los Pirineos. Hoy preside la desembocadura del valle del Aragón con dos grandes iconos que la caracterizan: su enorme ciudadela renacentista y una preciosa y valiosísima catedral románica. Jaca es también el punto de partida para hacer una ruta por el románico pirenaico: a solo 20 km, el monasterio de San Juan de la Peña es un conjunto formado por una iglesia románica del s. XI perfectamente mimetizada con su excepcional entorno natural y un majestuoso edificio basilical barroco en cuyo panteón real descansan los primeros reyes de Aragón. www.jaca.com, www.monasteriosanjuan.com
A la Vall de Núria en tren-cremallera
Parece increíble pero todavía queda en medio de los Pirineos un valle apartado de todo, sin coches, sin carreteras de acceso, pero al que se puede llegar fácilmente. Es la Vall de Núria, un valle a 2000 m de altitud, rodeado de montañas, con un santuario, un enorme lago central y una pequeña pista de esquí, al que se llega con un tren-cremallera en un vertiginoso recorrido. También se puede llegar a pie, por uno de los empinados senderos que parten de Queralbs y de otros puntos de la Vall de Ribes. www.valldenuria.cat
El Tren Amarillo
Otra de las historias ferroviarias de los Pirineos es el llamado Tren Amarillo, en la vertiente francesa. Se construyó a principios del s. XX para reducir el aislamiento del Capcir y la Cerdanya, uniendo Villefranche-de-Conflent y Latour-de-Carol, con un recorrido de 62 km. Es toda una proeza técnica gracias a sus 650 estructuras de ingeniería y 19 túneles. El llamado “Canari” por su color amarillo es el ferrocarril de vía métrica más alto del continente y que salva un desnivel de 1200 m. www.ter.sncf.com/occitanie/loisirs/train-jaune
Circo de Gavarnie
Como un gran anfiteatro de hielo, el enorme circo glaciar de Gavarnie es Patrimonio Mundial desde 1997 forma parte del Parc National des Pyrénées. Es uno de los enclaves pirenaicos más visitados, a pesar de que solo se puede acceder a pie. En medio de su impresionante paisaje de grandes moles brillan las aguas de la cascada de Gavarnie, la más elevada de Francia. Es también el cierre del camino a España, situada al otro lado de la cresta del anfiteatro. www.valleesdegavarnie.com
Beget
Está considerado uno de los pueblos más bonitos de Cataluña y no defrauda. Situado al final de una estrecha carretera desde Camprodon, está surcado por empinadas calles y viejas casas de piedra que mantienen su aire de villa medieval. Lo preside, como no, una iglesia románica, con un alto campanario de cuatro pisos, y cuenta con un par de puentes medievales. Desde la población parten varios senderos que llevan a parajes como las pozas de Beget, perfectas para refrescarse en verano.
Pic du Midi de Bigorre
Destaca el observatorio situado en la cima, a 2877 m de altitud, más cerca del cielo que de la tierra. Se puede llegar cómodamente desde La Mongie en 15 minutos gracias a dos teleféricos consecutivos: el Taoulet y el Pic du Midi, de 1781 m y 2629 m, respectivamente. Arriba, la experiencia es única desde el mirador suspendido, una pasarela metálica de 12 m de longitud, transparente en su extremo, que, literalmente, permite asomarse al vacío. No apto para quienes sufran vértigo. https://picdumidi.com