Xishuangbanna, al suroeste de China
A lo largo de la región se extienden pueblos y selvas remotas que la caracterizan. Pero algo está cambiando... La comunicación entre aldeas, las largas rutas de senderismo y su cultura y gastronomía ha llamado la atención de los extranjeros, que vienen de distintas partes del mundo para visitar Xishuangbanna.
Un camino de nuevo transitado
Remota esquina de la provincia de Yunnan, en el suroeste de China, culturalmente más próxima a Bangkok que a Beijing, Xishuangbanna ha pasado en la última década de ser un atípico destino mochilero para convertirse en núcleo del turismo nacional.
La región está de moda entre los turistas chinos, atraídos por su cálido clima, su diversidad cultural y una gastronomía igual de diversa y deliciosa –más vinculada a los pueblos del sureste asiático que a los chinos han–, así como por el boom de nuevos y ostentosos resorts de grupos hoteleros internacionales. Y todo ello sin necesidad de cruzar una sola frontera internacional, y pronto sin necesidad de subirse a un avión.
Xishuangbanna se fue ganando fama entre los viajeros extranjeros como destino para senderismo por la selva hasta aldeas remotas. Hoy, las plantaciones de caucho y plátano le han ido comiendo terreno a la selva, y el Gobierno se ha esforzado por comunicar hasta la última aldea por carretera.
Maravillosa diversidad
Xishuangbanna es hogar de 14 de las 55 minorías étnicas oficiales de China, con los dai como grupo más numerosos, casi un cuarto de su población. Esto convierte a la región en un precioso crisol de culturas y tradiciones. Aunque los viajeros chinos visiten sobre todo pueblos que parecen parques temáticos, donde se celebra la famosa y anual Fiesta Dai del Agua, quien desee vivir una experiencia más genuina aún puede ir a las montañas.
Todas estas culturas tienen en común una excelente gastronomía que combina influencias e ingredientes de China y el sureste asiático. A la región no le falta sabor: pescado a la barbacoa, salsas de pasto de limón, plátanos fritos con leche condensada y un excelente café local. Y los amantes del té disponen del pu-erh que, aunque cultivado y procesando en la región vecina, es aquí omnipresente.
Tren de alta velocidad
Durante mucho tiempo muy mal comunicada, buena parte de la actual bonanza de Xishuangbanna se debe a la exponencial mejora de sus conexiones de transporte con todo el mundo. La más significativa es la línea del tren de alta velocidad China-Laos, terminada a finales del 2021, que conecta Jinghong con Kunming y Vientián, capital de Laos, y está previsto que acabe llegando a Tailandia y Singapur.
Aunque los caballos tibetanos y las hojas de té ya no sean artículos tan demandados, esta mejora de infraestructuras debería colocar a Xishuangbanna en una posición central en las rutas comerciales entre China y el sureste de Asia.