Explora lo mejor en viajes 2024
Acorralado por una espesa jungla y envuelto en bruma, el caudaloso Sepik atraviesa el noroeste del país como una perezosa serpiente marrón con la panza llena. Es la savia de la región y hábitat de aldeas ricas en tradición artística: un cofre del tesoro cultural del Pacífico. Aquí se puede alquilar una canoa adornada con una cabeza de cocodrilo y surcar las vías fluviales de un pueblo a otro, durmiendo en palafitos y explorando las imponentes haus tambarans (casas de espíritus).