Un viaje a Australia en familia

© Martin_Valigursky_Shutterstock
Niños jugando en la Gold Coast, Australia

Atracciones que los niños disfrutarán

Australia es un verdadero paraíso para las familias en búsqueda de aventuras: canguros, koalas y otros animales extraños sorprenderán a los más jóvenes, mientras que los preadolescentes preferirán el surf, el buceo o el outback, que recuerda un poco al Salvaje Oeste. Sin duda alguna, un destino a tener muy en cuenta para los que quieran jugar a convertirse en grandes exploradores.

Naturaleza a gran escala

Australia permite disfrutar de la naturaleza a lo grande, con unas dimensiones únicas que convierten cada una de las actividades al aire libre en una aventura única e inolvidable.

 

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Blue Mountains, Australia © Lexter Yap / Shutterstock
 Blue Mountains, Australia © Lexter Yap / Shutterstock

  • Kings Canyon (Parque Nacional Watarrka, Territorio del Norte), una falla impresionante en el corazón del desierto rojo.
  • Gold Coast (Queensland) y Surfers Paradise, donde los más pequeños aprenderán a surfear y admirarán la destreza de surfistas más competentes.
  • El outback, el interior australiano, un paisaje árido con pueblos fantasma dignos de una película del oeste.
  • Algunas de las 7000 playas que vigilan nada menos que 12 600 socorristas.
  • Tasmania, la isla que se puede explorar en el tren cremallera Wilderness Railway, y los paisajes salvajes y tropicales de las islas Whitsunday (Queensland) y las islas Tiwi (Territorio del Norte).
  • Gran Barrera de Coral (Queensland), donde admirar el coral en todo su esplendor buceando con tubo o a través del suelo de cristal de un barco, o bien visitando el acuario de Sídney.
  • Los eucaliptos tan altos como catedrales del Valle de los Gigantes (Australia Occidental).

La tierra de los canguros

Los amantes de los animales más jóvenes tendrán la oportunidad de conocer de cerca un montón de animales que no suelen verse en el resto del mundo.

 

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Canguros, Australia © Natalia Kirichenko / Shutterstock
 Canguros, Australia © Natalia Kirichenko / Shutterstock

  • Descubrir animales australianos de nombres extraños, como wómbats, quokkas (marsupiales del tamaño de un gato), casuarios (parecidos a los emús), emús y canguros. Se pueden ver en numerosos zoos, especialmente en Taronga, en Sídney, uno de los zoos más bonitos del mundo.
  • Acariciar koalas en la reserva de koalas de Lone Pine, cerca de Brisbane.
  • Ver tiburones, ballenas... y tiburones ballena en la costa sur.
  • Realizar una excursión en barca por el río Adelaida, en el Territorio del Norte, para ver saltar cocodrilos o contemplar cocodrilos más tranquilos en el Crocodylus Park & Zoo de Darwin.

La magia de la cultura aborigen

Descubrir nuevas culturas es una parte importante de la magia del viaje, un aprendizaje que, sin duda, abrirá el horizonte de los pequeños viajeros.

  • Los colores cambiantes del enigmático monolito Uluru, antes conocido como Ayers Rock (Territorio del Norte). Es el lugar más sagrado para los aborígenes.
  • Aprender sobre esta cultura antigua y compleja en el Parque Nacional Kakadu o en la península de Cabo York, en el extremo norte.
  • Las maravillosas pinturas ancestrales del centro cultural del Parque Nacional de Uluru-Kata.

Excursiones perfectas para los más pequeños

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Parque acuático de atracciones, Gold Coast, Australia © Martin Valigursky / Shutterstock
 Parque acuático, Gold Coast, Australia © Martin Valigursky / Shutterstock

  • Los parques de atracciones de la Gold Coast (Queensland): Infinity , el parque acuático Sea World y Warner Bros Movie World para conocer a Shrek y a Scooby-Doo.
  • Los parques temáticos para retroceder en el tiempo: Pioneer Settlement, en Swan Hill (Victoria), con una reconstrucción de un barco de vapor, y Sovereign Hill , un museo al aire libre que muestra un pueblo de la época de la fiebre del oro.

Lo que hay que saber

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Diciembre en Brisbane, Australia © Martin Valigursky / Shutterstock
 Diciembre en Brisbane, Australia © Martin Valigursky / Shutterstock

Mejor época de visita

Se puede visitar todo el año, ya que el clima en Australia siempre es bueno en alguna parte. En el centro y el sur las estaciones son opuestas a las del hemisferio norte (verano de diciembre a febrero y un invierno suave de junio a agosto). En el norte hay dos estaciones: la seca (de mayo a octubre) y la del monzón (de noviembre a abril).

Precios

Viajar por Australia suele costar más de lo que se piensa. Es más caro que Norteamérica, pero no tanto como Europa Occidental. Llegar hasta allí supone el primer gran desembolso y desplazarse el segundo. Los vuelos internos son especialmente caros, ya que hay poca competencia. Y luego está el fuerte dólar australiano. El alojamiento y la comida son caros, aunque gozan de estándares altos. El combustible se encarece lejos de la costa, que está más poblada. Los paquetes que combinan transporte, hoteles y circuitos pueden suponer un ahorro.  Con un clima benigno y una naturaleza espléndida, el camping supone una gran opción para abaratar costes. 

 

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Caravana en el
 Caravana en el 'outback', Australia © Philip Schubert / Shutterstock

Cómo desplazarse por Australia

Si se dispone de poco tiempo, los vuelos internos son necesarios, dadas las enormes distancias. Los autobuses son prácticos (no como los trenes), pero la opción ideal es alquilar un vehículo (es necesario un permiso de conducir internacional). Con tantas largas distancias por delante, los niños agradecerán las comodidades de una autocaravana, y casi todos los campings ofrecen buenas instalaciones (piscinas, barbacoas) a un precio razonable. Es mejor reservar con antelación antes de la salida, especialmente en periodos vacacionales. Se conduce por la izquierda.  

Advertencias

  • No hay que subestimar nunca las distancias ni los tiempos al organizar un viaje, especialmente con niños.
  • Si se conduce por zonas desérticas aisladas del outback, hay que llevar suficiente agua y una lata de gasolina de emergencia.

Un dato gastronómico

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Huevo benedictino, comida tipica de Melbourne, Australia © dangtrinh0612 / Shutterstock
 Huevo benedictino, comida tipica de Melbourne, Australia © dangtrinh0612 / Shutterstock

La cocina australiana es variada: pescado y crustáceos deliciosos en la costa; carnes sabrosas (incluso avestruz y canguro); abundantes frutas y verduras en el interior. En las ciudades hay numerosas influencias extranjeras y es posible comer casi cualquier cosa en cualquier parte. Probablemente los niños serán felices con clásicos como salchichas con puré de patatas, pizza, pasta y ensaladas variadas. En las playas suele haber puestos de fish and chips (pescado frito con patatas fritas) de buena calidad. A menudo sirven tiburón.

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