No hace falta ir muy lejos para tener unas vacaciones de ensueño
Te proponemos descubrir lo que esconden grandes ciudades europeas y a precio “low cost”.
Con las vacaciones de verano a la vuelta de la esquina todos estamos ya buscando fecha en nuestro calendario para disfrutar de unos días de desconexión y hacerlo de la mejor forma posible: viajando. Y para demostrar que viajar en agosto no tiene por qué ser caro, hemos elaborado un listado con algunos de los más destacados destinos baratos de Europa a los que escaparse por vacaciones.
Lisboa: La capital del país vecino, Portugal, resulta siempre un buen plan. Su decadencia, su encanto y su irresistible gastronomía la convierten en un destino barato perfecto para viajar este verano. Unas vacaciones en Lisboa son sinónimo de un recorrido por una capital con mucha historia, de unos deliciosos pastéis de Belém de la pastelería más famosa del barrio de Belém, de pasear por el Barrio Alto al anochecer o de tomar cualquiera de sus característicos tranvías. Tres de las cosas que todo el mundo debería hacer al visitar Lisboa, aunque en esta ciudad esto es solo el principio.
Berlín: “Pobre pero sexy”, todo un slogan quedó grabado a fuego en una ciudad en continua efervescencia. Mucho más que su mundialmente y desaparecido muro (solo quedan en pie algunos trozos representativos), Berlín es hoy por hoy un destino barato a donde volar, comer y dormir a precios razonables. Entrar en Berlín por la puerta grande es tan sencillo como situarse bajo la famosa Puerta de Brandemburgo, actual centro de celebración de los berlineses y todo un orgullo en la ciudad. Junto a ella, el Reichstag (Parlamento); juntos forman el epicentro de la Alemania unificada. Pero mucho más allá de sus innegables atractivos turísticos, Berlín es también conocida por su apabullante oferta gastronómica a precios francamente razonables. Nadie debería abandonar Berlín sin haber probado su famoso currywurst, disponible en casi cualquier esquina de la ciudad y lo mejor, ¡a buenos precios!
Sicilia: esta isla en Italia es la más grande del Mediterráneo y, hasta hace bien poco, uno de los secretos mejor guardados por viajeros en busca de un destino con mucho por descubrir y sobre todo, un destino donde hacerlo a buenos precios. Sicilia es la isla de cine que enamoró al director Francis Ford Coppola, un destino de película cuyos escenarios pueden hoy visitarse en pueblos como Savoca. Aquí se ubican algunas de las escenas más míticas de El Padrino, que por temas de seguridad no se pudo rodar en Corleone, el pueblo de donde era originario Don Vito. Junto a Savoca, merece la pena visitar también Forza d’Agro, y no marcharse bajo ningún concepto sin probar las pizzas de Antichi Muri. Baratas y sobre todo, deliciosas.
Mallorca: Bendecida por un sol que brilla durante casi los 365 días del año, la isla de Mallorca, en España, es mucho más que un destino de sol y playa. Con el objetivo de que ‘otra isla es posible’, son unas vacaciones de verano en el desconocido valle de Orient, situado en pleno corazón de Mallorca, las que se nos antojan como perfectas, y sobre todo a buenos precios. Aquí parece como si lo humano y lo divino se hubieran aliado para lograr un espacio lo más cercano posible a la perfección. Una bucólica y desconocida estampa donde parece que el tiempo se haya detenido para observar sus olivares, los campos repletos de árboles frutales y los rebaños de ovejas pastando. Y además de todo lo anterior cabe sumar la cantidad de oferta de vuelos baratos en agosto para aterrizar en Mallorca, lo que aún aporta a este destino un atractivo mayor.
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