Unos días en Grecia o Hungría para celebrar el carnaval
Las fechas mandan y justo cuando queden 40 días para que se inicie la Semana Santa, el mundo se teñirá de color y fiestas. ¡Es carnaval! Y eso quiere decir que ha llegado la hora de escaparse a celebrar y buscar la diversión: el objetivo es sumergirse en el espíritu del carnaval.
El carnaval en Grecia
En Grecia, las tres semanas previas a la Cuaresma, que precede a la Pascua griega ortodoxa, componen la temporada de carnaval conocida localmente como Apokries (en el 2019, del 17 de febrero al 10 de marzo). El carnaval tiene relación con el catolicismo, pero sus raíces se remontan a los antiguos festivales en honor de Dionisio, dios del vino y la fertilidad. En la actualidad, la mayoría de los atenienses disfruta del Apokries, por lo que febrero y marzo son una época excelente para escaparse y visitar Atenas.
Gente disfrazada marcha por las calles de Atenas durante el Apokries, Grecia © Yavuz Sariyildiz / Shutterstock
Desfiles y fiestas en Atenas
En esta época, los atenienses tienen una buena excusa para salir más de lo habitual, y la vida nocturna de la ciudad resucita tras las semanas de tranquilidad que siguen a la Navidad y el Año Nuevo. Bares y locales nocturnos organizan fiestas temáticas, y fiesteros de todas las edades, bien disfrazados, son una imagen habitual en las calles y en el transporte público.
Las fiestas culminan el último fin de semana, sobre todo el domingo, cuando coinciden numerosas celebraciones al aire libre, bailes de máscaras y desfiles. Las actividades más destacadas y concurridas son el desfile de Moschato, un barrio costero cerca del Pireo, y las abarrotadas calles de Plaka, el barrio antiguo, donde hordas de lugareños se enzarzan en batallas de bates de plástico bajo el confeti.
Carroza en el carnaval de Patras, el mayor evento de este tipo de toda Grecia © siete_vidas / Shutterstock
Días especiales en Grecia
El segundo jueves del Apokries (el Tsiknopempti), todo el mundo come carne. Un denso humo envuelve la ciudad desde primera hora de la mañana, cuando los tenderos montan sus mini barbacoas espontáneas en la acera. Para cenar en un restaurante o una brasería durante el Tsiknopempti hay que reservar mesa con varios días de antelación. Una buena opción es Telemachos, en Kolonaki, el barrio chic.
El Lunes de Ceniza (oficialmente, el primer día de Cuaresma) sigue al fin de semana que cierra el carnaval. Es un día festivo y los atenienses suelen aprovisionarse de ouzo y marisco para ir de pícnic al campo o a la costa y hacer volar cometas. Los pinares de la colina de Filopapos, con vistas al golfo Sarónico, cerca de la ciudad, son un buen sitio para ir.
La gente de Galaxidi celebra el Lunes de Ceniza arrojándose harina de colores, Grecia © Aerial-motion / Shutterstock
Excursiones desde Atenas
Cada parte de Grecia tiene costumbres y celebraciones propias, pero para disfrutar del carnaval griego por excelencia conviene viajar a Patras, en el Peloponeso, el tercer fin de semana de carnaval. Toda la ciudad lo celebra y el gran desfile del domingo recuerda a las escenas que se ven en el carnaval de Brasil. Es importante reservar alojamiento con suficiente antelación, a menos que se esté dispuesto a disfrutar de tres días de fiesta sin tregua (lo cual es factible).
Posiblemente, las celebraciones más espectaculares y movidas del Lunes de Ceniza son las de la pintoresca localidad de Galaxidi, en el golfo de Corinto, en el centro de Grecia. Lugareños y cientos de visitantes participan en una enorme batalla con harina de colores por las calles de la ciudad hasta altas horas de la noche, cuando todo el mundo va cubierto de harina. Diversión en estado puro.
Temporada de carnaval en Hungría
A finales de febrero comienza en Hungría la fiesta del Farsang, el carnaval que despide al invierno con coloridos desfiles, fastuosas fiestas y sabrosas especialidades culinarias. Las celebraciones se reparten por todo el país, combinando tradiciones paganas y cristianas, y la diversión se prolonga hasta el Miércoles de Ceniza, cuando empieza la Cuaresma.
Las máscaras demoníacas son una tradición del carnaval anual Busójárás en Mohács, Hungría © samatotoh / Shutterstock
Ahuyentar el invierno en Busójárás
Para disfrutar del mayor carnaval de Hungría hay que ir a Mohács, al sur del país, y descubrir el Busójárás. Este alocado festival de primavera suele celebrarse en ‘la cola del carnaval’ (Farsang Farka; en 2019, del 28 de febrero al 5 de marzo) y comienza cuando los Busók –hombres disfrazados con pieles de oveja y máscaras de madera con cuernos y sonrisas amenazantes– llegan en barco por el Danubio. Acto seguido, los diabólicos Busók persiguen a las mujeres, espectadoras incluidas, y hacen ruidos terribles para ahuyentar el frío.
La culminación de este festival cargado de imaginería pagana llega con la quema del ataúd del Farsang (que simboliza el invierno) en una gran hoguera de la plaza principal de la ciudad. Aunque el Busójárás se celebra para ahuyentar al invierno, una parte de sus orígenes se remonta a la invasión turca, cuando los lugareños se vistieron de diablos para asustar a los invasores otomanos, los cuales se retiraron a los pantanos de la zona. Sea como fuere, es una celebración memorable.
Comida húngara tradicional a la venta en plena calle durante el carnaval, Hungría © Tsuguliev / Shutterstock
Unirse a la fiesta en Budapest
No es necesario alejarse de Budapest para disfrutar del espíritu del carnaval: hay fiestas por toda la ciudad, sobre todo durante el mes de febrero. Si el viajero visita la capital de Hungría el Jueves Lardero (Torkos Csütörtök), que suele ser el último jueves antes de la Cuaresma, verá que muchos restaurantes ofrecen descuentos del 50%. Y esto no solo es la excusa perfecta para comer gulash y beber pálinka (licor de frutas); también es un buen momento para desmelenarse en las fiestas de carnaval que celebran los bares y locales nocturnos más de moda de la ciudad en una noche de desenfreno. Hay que vestirse bien, lucir una buena máscara y un buen disfraz (los temas varían) y pasarse toda la noche de fiesta en Budapest.
15 rincones secretos en Budapest
Darse un festín de buñuelos del Farsang
Si el viajero está en modo goloso, que no deje de probar los buñuelos del Farsang (Szalagos Farsangi Fánk). Estas exquisiteces se fríen en aceite, se voltean, se rellenan de crema o mermelada de albaricoque y espolvorean de azúcar por encima. A mediados de febrero se celebran festivales dedicados a estos buñuelos por todo el país, incluidos Budapest, los montes Pilis, Miskolc y Nagykanizsa. En Budapest también se pueden comprar deliciosos buñuelos en The Box Donut (Teréz körút 62).