Grandes viajes: el río Mekong

© Jayden Hunter / Lonely Planet
Delta del río Mekong, Vietnam

Recorrido por el río Mekong, descubrir la diversidad cultural y geográfica del Asia rural

Es uno de los ríos más largos del mundo y seguirlo permite conocer la gran diversidad cultural y geográfica del continente, absorber la influencia del budismo y descubrir el Asia rural más pintoresca, casi siempre bañada por una belleza natural, mística.

El Mekong brota de las fuentes de la llamada llanura tibetana, una planicie enorme y elevada sita en Asia central, rodeada por montañas y que comprende la mayor parte del Tíbet además de secciones de China. Nace junto a otros dos ríos importantes, el Salween y el Yangtsé, con los que avanza en paralelo por las gargantas de las montañas Hengduan. Luego se ramifica al sureste y forma la frontera entre Myanmar (Birmania) y Laos.

Río Mekong, Si Phan Don, Laos © Photography by Angelica Andrea Cruz / Getty Images / Flickr RF Río Mekong, Si Phan Don, Laos © Photography by Angelica Andrea Cruz / Getty Images / Flickr RF

Recorre 100 km hacia el sur antes de virar al suroeste, donde forma frontera natural con Tailandia. Atraviesa el centro de Laos, riega Luang Prabang y flanquea su capital, Vientián. Se funde con el río Mun y luego cruza Camboya, donde también engulle el río Sap, antes de pasar junto a la capital camboyana, Phnom Penh. Para cuando alcanza la frontera de Vietnam ya se ha fracturado y vierte sus aguas en un gran delta con nueve cauces que irrigan una de las mayores regiones de arrozales del mundo, con mercados flotantes, pintorescos pueblos rurales y las sonrisas que se propagan hasta alcanzar el mar de China Meridional.

El nombre “Mekong” es una deformación inglesa que procede del tailandés y el laosiano: Mae (madre), Nam (agua) y Khong (Ganges, en sánscrito). Aunque millones de personas dependen del río para el consumo de agua, la electricidad y la agricultura, la cuenca del Mekong es tan rica en biodiversidad que solo la supera la del Amazonas. Cuenta con 20 000 especies de plantas, 430 mamíferos, 1200 pájaros, más de 800 reptiles y anfibios y 850 especies de peces, como la manta raya de agua dulce. Solo en el 2009 se descubrieron 145 nuevas especies en el Mekong.

El asentamiento más antiguo junto al río se remonta al 2100 a.C. El Imperio jemer floreció a orillas del Mekong en el s. V. Los portugueses fueron los primeros europeos que exploraron el Mekong, pero los franceses tomaron Saigón en 1861 y establecieron un protectorado en Camboya en 1863, para expandirse hasta Laos en 1893, y su influencia solo se desvaneció después de la Segunda Guerra Mundial y la guerra de Vietnam.

El viaje hoy

Río Mekong, Kompong Cham, Camboya © Guido Dingemans, De Eindredacti / Getty Images / Flickr RF  Río Mekong, Kompong Cham, Camboya © Guido Dingemans, De Eindredacti / Getty Images / Flickr RF 

El viaje empieza en el reino de los pequeños maestros, los santos budistas y los pastores nómadas. Esta es la llanura tibetana, una estepa elevada rodeada de picos del Himalaya, tachonada de lagos oscuros y ondulantes pastos. El misterio tangible de China se profundiza cuando se sigue el Mekong hacia el sur a lo largo de la provincia de Yunnan, una de las más agrestes del país, con sus frondosas montañas de piedra caliza y profundas gargantas fluviales. Se rodea la ciudad de Lijang al norte y se atraviesa el sofocante epicentro de turismo (sexual) tropical de Jinghong al sur, antes de entrar en Laos, que despierta lentamente como destino bohemio. Al norte el viajero se encontrará con las tribus montañesas y su palpable influencia tibetana.

El tramo medio del Mekong es navegable durante todo el año, desde Heuan Hin (al norte de los rápidos de Khemmarat y la provincia de Savannakhet) hasta Kok Phong, en Luang Prabang. Estos rápidos y las impetuosas cascadas de Khon Phapheng, en Si Phan Don, han impedido que el Mekong se transformara en una autopista regional, lo que explica parcialmente que la región haya mantenido su ritmo tranquilo, rural, incluso en la exquisita Luang Prabang, y el porqué de su gran biodiversidad. En su parte más ancha, cerca de las 4000 seductoras islas de Si Phan Don, al sur, el río puede ensancharse hasta los 14 km en la estación de las lluvias, rodear miles de islas e islotes en su curso hacia el sur, donde se puede seguir el Mekong Discovery Trail, echar un vistazo al raro delfín de agua de las inmediaciones de Kratie y explorar templos antiguos y los frondosos paisajes de Kompong Cham, al este de Camboya. Pero la última gracia del río está cerca de la ‘boca del dragón’, en el delta, un idílico paisaje alfombrado en una gran variedad de verdes. Es un mundo acuático en el que flotan barcos, casas y hasta mercados por los interminables canales y arroyos. Lidiando con la naturaleza y las estaciones, su gente produce una de las cosechas de arroz más prósperas de la tierra.

Río Mekong, Kratie, Camboya © Christian Prevost / Lonely Planet  Río Mekong, Kratie, Camboya © Christian Prevost / Lonely Planet 

Atajo

El delta del Mekong es un laberinto; si el viajero pretende tomar una foto del poderoso río, conviene que traiga sus objetivos aquí y explore los pintorescos pueblos de las riberas, el colorido de los mercados flotantes, las reservas de pájaros y las zonas playeras rústicas.

Desvío

Angkor Wat, la octava maravilla del mundo, supone un sencillo e inolvidable desvío. Los templos, construidos entre los ss. IX y XIII, son una perfecta fusión de ambición creativa y devoción espiritual. Los tres más maravillosos incluyen los rostros fantásticos de Bayon, el romántico Ta Prohm y el inmenso y conmovedor Angkor Wat, el templo por antonomasia.

Experiencias únicas

• Vagar por las cabeceras de los ríos de la inolvidable llanura tibetana, donde las culturas chocan a la sombra del majestuoso Himalaya.
• Explorar la mística y encantadora provincia de Yunnan, en China, salpicada de picos calizos y tallada por profundas gargantas fluviales.
• Mezclarse con las tribus montañesas del norte de Laos, un territorio fascinante del curso del Mekong.
Dejarse seducir por los monjes de color azafrán, las calles sombrías, los edificios coloniales, las artesanías y pastelerías de la encantadora y deliciosa Luang Prabang.
• Relajarse en las islas y playas que componen Si Phan Don, el mejor destino turístico del sur de Laos.
• Explorar el amplio y colorido mundo acuático que conforma el delta del Mekong. 

 

  • DISTANCIA - 4909 KM  
  • PAÍSES - CHINA, LAOS, CAMBOYA Y VIETNAM
  • DURACIÓN IDEAL - DOS SEMANAS  
  • MEJOR ÉPOCA - DE DICIEMBRE A ABRIL

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