Consejos para viajeros espabilados
El verano sería un momento magnífico para visitar las atracciones universales que todo el mundo quiere ver alguna vez en la vida, como el Louvre, la Última Cena de Leonardo, la Alhambra… si no fuera por las colas. Hay algunos trucos que permiten tener alguna posibilidad de éxito; para asegurarse el acceso a determinados lugares, lo mejor es anticiparse.
El verano sería un momento magnífico para visitar clásicos y populares puntos de interés, los que todo el mundo quiere ver alguna vez en la vida… si no fuera por las colas que hay que aguantar para entrar.
Louvre, París
Muchos turistas piensan que la larga cola ante la pirámide del Louvre es algo inevitable y que forma parte de la liturgia de entrar en el famoso museo francés. Pero no es cierto: se pueden comprar las entradas aquí con anticipación tanto la general como las de exposiciones temporales. Por desgracia, lo que no se puede evitar de ninguna forma son las multitudes agolpadas alrededor de la Mona Lisa.
Excavaciones de la Tumba de San Pedro, Ciudad del Vaticano
Para ver de verdad la Basílica de San Pedro hay que bajar hasta sus subterráneos. Es una visita bastante poco conocida que lleva por las antiguas callejuelas y a una necrópolis pre-cristiana y se completa con la visita a las excavaciones de lo que podría ser la mismísima tumba de San Pedro. Solo pueden entrar 12 personas por grupo y hasta 250 al día por lo que conseguir uno de los tickets (por correo electrónico o fax y con la mayor antelación posible) es realmente algo muy valioso. La entrada se debe solicitar mediante petición escrita: a scavi@fsp.va, o bien por fax al número (39) 06 698 730 17 o directamente presentándose en el Ufficio Scavi.
La última Cena de Leonardo Da Vinci, Milán
Solo aquellos que han reservado previamente pueden tener la garantía de llegar a la ver el interior del refectorio del convento dominico de Santa Maria delle Grazie donde se encuentra el mural de la famosa Cena de Leonardo. Los grupos que pueden entrar son de 25 personas como máximo. Se pueden pasar 15 minutos contemplando la obra maestra (y un buen rato riéndose de las teorías conspiratorias tan de moda en torno al autor y su obra). Las entradas se pueden reservar en la web del Cenacolo Vinciano.
El Palacio de la Alhambra y el Generalife, Granada
Seis mil personas visitan la Alhambra cada día en temporada alta y muchos hacen cola antes del amanecer para conseguir entrar en sus fantásticos jardines y palacios. Pero es más sencillo reservar online aquí, y de paso realizar también la visita nocturna, una experiencia llena de magia. Las entradas se pueden recoger en los cajeros de la Caixa de toda la ciudad.
Torre de Londres y otros palacios reales, Londres
Hasta hace poco, la mejor manera de evitar las colas en las orillas del Támesis era cometer un acto de traición. Ahora se pueden evitar las largas filas de niños de colegios y entrar directamente por la derecha, en la zona delantera, reservando aquí con antelación. También merece la pena ir temprano a ver la Torre o Hampton Court para escapar de las grandes aglomeraciones turísticas del verano.
Corridoio Vasariano , Florencia
El Corredor de Vasari es un pasadizo cubierto que une el Palazzo Vecchio y Galleria degli Uffizi al Palazzo Pitti, a través de la parte superior del Ponte Vecchio. Es una espectacular galería llena de miles de obras de arte rara vez vistas, incluida la colección de autorretratos de los Uffizi. El problema es que se puede visitar solo en ciertas épocas preestablecidas del año, en pequeños grupos, y conviene reservar aquí.
Museo del Prado , Madrid
El entusiasmo en visitar museos como el Prado puede reducirse mucho si hay que hacer una enorme cola para entrar. Y además no es necesario: se puede reservar con antelación aquí y disponer así de mucho más tiempo para callejear por Madrid o animarse a visitar otros museos menos conocidos.