Las autoridades de Venecia han desvelado sus últimas novedades para frenar el turismo de masas
Venecia va a introducir un sistema de reservas para viajeros e impulsará una nueva tasa turística cuyo coste aumentará a 10 € en determinadas épocas del año.
Puente de Rialto, Canal Grande, Venecia, Italia © Roman Sigaev / Shutterstock
La nueva tasa turística se aplicará a partir del 1 de mayo del 2019. Cada turista pagará una tasa estándar de 3 €, pero a partir del 1 de enero del 2020 el coste ascenderá hasta los 8 € en temporada alta y los 10 € en “períodos críticos” como los fines de semana de verano, cuando los puntos de interés de Venecia están abarrotados de gente. Las distintas tarifas estarán representadas por pegatinas verdes, rojas y negras.
Esta medida ha sido tachada de “inútil y dañina” por Gian Marco Centinaio, ministro italiano de turismo. “¿Queremos convertirnos en un país que ahuyenta a los turistas?”, se preguntaba en Twitter el miércoles siguiente a la presentación de los planes, añadiendo después “esto es para ponerse a llorar”.
Turistas llegando a Piazzale Roma, Venecia, Italia © Petr Jilek / Shutterstock
Es muy probable que la nueva tasa turística quede incluida en el precio del billete de tren, avión, autobús o barco del viajero, que este la pague en el momento de la compra y que después sea transferida a las autoridades de la ciudad. Solo se aplicará a los visitantes de un día, puesto que los turistas de Venecia ya abonan una tasa turística si pernoctan al menos una noche en la ciudad.
Los venecianos estarán exentos de pagarla, igual que los italianos que se desplazan por negocios, trabajadores locales, estudiantes, familiares de lugareños, pacientes de centros de salud de la zona, voluntarios y los menores de seis años. No pagar la tasa cuando se está obligado a hacerlo conlleva una multa de hasta 450 €.
Rechazo a los cruceros, Venecia, Italia © Ithmus / Flickr
Mientras Venecia consiente a desgana el turismo de masas, las autoridades preparan la introducción de un nuevo sistema de reservas turísticas. El alcalde de la ciudad, Luigi Brugnaro, dijo que a partir del 2022 los visitantes también deberán “reservar acceso” a la ciudad, aunque no especificó cómo iba a aplicarse dicha medida. Se espera que este nuevo sistema ayude a las autoridades a regular el número de visitantes, permitiendo controlar mejor el flujo turístico en los períodos más intensos.
Protesta en las calles de Venecia, Italia © Kate Kony / Shutterstock
Estas iniciativas pretenden controlar el número de turistas en una ciudad que atrae a unos 30 millones de visitantes cada año. Ya se han implementado una serie de medidas para frenar la masificación turística; que incluyen alejar a los grandes cruceros del centro de la ciudad y plantearse la prohibición de construir nuevos hoteles; incluso se tanteó en el 2018 la instalación de tornos en Piazzale Roma.
La campaña #EnjoyRespectVenezia, introducida el pasado verano, enseña a los turistas lo que no hay que hacer: nadar en los canales, montar pícnics en espacios públicos, detenerse mucho rato en los puentes, arrojar basura, montar en bicicleta por la ciudad y hacer turismo en bañador.