No siempre es necesario haber ahorrado para comenzar a viajar por el mundo. Muchos jóvenes de todos los países (sobre todo anglosajones) recorren el planeta trabajando para costear parte de su viaje, gracias a la Working Holiday Visa. Otras fórmulas en auge para viajar barato son el Wwoofing, el trabajo en cruceros o en hoteles y el voluntariado a cambio de alojamiento.
Internet está lleno de oportunidades para viajar por poco dinero, siempre que se esté dispuesto a dar algo a cambio.
Working Holiday Visa
Se trata de un acuerdo que existe entre diversos estados que permite que sus ciudadanos se instalen temporalmente en otro país con un permiso también temporal de trabajo. Una forma de conocer un país trabajando en él.
Por desgracia, para los españoles no hay muchos acuerdos de este tipo. Las condiciones para trabajar en Australia, Canadá o Nueva Zelanda son parecidas: tener entre 18 y 30 años, no traer niños consigo, tener un seguro médico que cubra la estancia, tener un billete de ida y vuelta o probar que se tiene dinero para comprar el de vuelta y demostrar que se tiene una cierta cantidad de dinero en la cuenta bancaria.
España ha firmado acuerdos con Nueva Zelanda para un cupo de unas 200 visas por año, y con Canadá (750 plazas de Working Holiday, 200 para Young Professionals y 50 para International co-op Intership). Por ahora, no existe posibilidad para los españoles de obtener la Working Visa para Australia.
Se puede tener más información de este tipo de visados en las las embajadas y en las webs de los departamentos de inmigración.
WWOOfing: trabajar en granjas orgánicas por todo el mundo
Wwoof significa World Wide Opportunities on Organic Farms, o lo que es lo mismo: oportunidades para trabajar en granjas orgánicas en todo el mundo. Hacer Wwoofing es una forma de viajar trabajando, incluso en países en los que no está permitido a los extranjeros trabajar sin permiso. Se trata de trabajar media jornada a cambio de alojamiento y comida, una especie de trueque de mano de obra acordado entre el viajero y la granja orgánica. La fórmula es flexible y se puede trabajar dos días, dos semanas o dos meses, trabajando en una granja mientras que se conoce el país. Hay granjas de todo tipo y trabajos muy variados, desde recoger manzanas hasta criar mariposas o ayudar a cuidar caballos. Hay granjas para vegetarianos, para veganos, granjas de flores tropicales...
Para hacer Wwoofing hay que registrarse y pagar una pequeña cuota para acceder al listado de todas las granjas y el tipo de trabajo que ofrece. El sistema proporciona un número de referencia que pedirán las granjas a las que se acuda a pedir trabajo.
Esta fórmula se emplea sobre todo en las antípodas (Nueva Zelanda y Australia) pero también en otros países europeos como Alemania. Se puede investigar más en su página oficial.
Trabajo voluntario
Es diferente al Wwoof y a la Work Holiday Visa. Se trata de trabajar voluntariamente en hoteles, granjas y sobre todo en albergues, a cambio de alojamiento. Normalmente se trabaja unas horas y a cambio dan alojamiento y a veces también comida y algo de dinero de bolsillo. Normalmente hay que trabajar unas horas y a cambio se recibe alojamiento y a veces también comida y algo de dinero de bolsillo. Lo normal es trabajar entre dos y seis horas al día a cambio de alojamiento gratuito, y permite acumular horas para luego disfrutar de algunos días libres. No suele requerir un mínimo de días.
El problema es que hay mucha demanda. Lo mejor para ir cambiando de lugar y viajar mientras se trabaja es unirse a alguna de las redes sociales de trabajo voluntario como HelpX, que abarcan todo el mundo. Se suele cobrar una de unos 20 euros para unirse a la red y hay establecimientos en todo el mundo, pero sobre todo, una vez más, en Australia y Nueva Zelanda.
Vacaciones (gratis) en el mar
Hay una serie de páginas web que permiten encontrar trabajo temporal en barcos de crucero (camareros, guías, intérpretes, conferenciantes, animadores, etc.). Así se puede recorrer el mundo en barcos en los que costaría una fortuna viajar, y además, ganar algo de dinero. Las jornadas no suelen ser demasiado largas y siempre hay tiempo libre para disfrutar.