Redescubrir Bali en la relajada Pemuteran
Sinuosos bucles verdes se despliegan por doquier a medida que el viajero avanza por los escarpados montes centrales de Bali. Es un mosaico atemporal de bancales de arroz y las típicas vistas que hacen que uno busque instintivamente la cámara, incluso antes que el cerebro diga “Aquí hay una foto preciosa”.
Pero quizá lo mejor de este paisaje es lo que no aloja: hordas de turistas. Ello es debido a que esta carretera, que recorre la costa norte de Bali (Indonesia) desde la pequeña localidad de Antosari, al oeste, es uno de los secretos viajeros mejor guardados de la isla. Solo por ello el trayecto ya merece la pena, pero por muy espectacular que resulte, no es más que el camino a la verdadera meta: el resort playero de Pemuteran.
Oculto en el extremo noroeste de Bali, este apacible refugio ha sabido evitar las multitudes y la sobredemanda de lugares como Candidasa, Lovina y Ulu Watu gracias a una planificación inteligente y al compromiso de la comunidad por evitar los estragos de una excesiva urbanización.
Pemuteran terrestre
Las olas que rompen en la costa de Pemuteran apenas dan para la práctica del surf, ya que la zona está protegida por arrecifes, como el resto de la costa norte de Bali, pero sus suaves caricias sobre la arena volcánica acentúan el aspecto lánguido de las playas de Pemuteran. Es un sitio para desprenderse de las sandalias y las preocupaciones, y dedicarse a tomar el sol en una tumbona.
Cuando avanza la tarde y se alargan las sombras, un gratificante paseo por la arena abre el apetito para cenar. Los niños del pueblo terminan el día jugando a fútbol junto a la orilla mientras los pescadores arreglan sus barcos de pesca sobre la línea de la marea alta. El viajero verá muchos barcos a medio construir, y puede que un montón de sonrisas, porque a la gente le gusta hacer una pausa para ofrecer el tradicional selamat malam (buenas tardes).
Es buena idea pararse a ver el destacado proyecto medioambiental local, Bio Rocks, prueba del interés por el turismo y el medioambiente. Por los cables que emergen de vez en cuando de la arena y van hacia el mar circulan cargas bajas de electricidad, que se emplean en redes metálicas para criar coral nuevo. El arrecife de Pemuteran, antaño dañado por la pesca con dinamita y debilitado por el cambio climático, gana salud año tras año con el nuevo coral, que crece cinco veces más rápido de lo normal gracias a este innovador proyecto.
Pemuteran submanio
La doble bahía de playas de Pemuteran, en forma de hueso, ya es motivo suficiente para visitar la zona, pero la razón principal queda al oeste, en Pulau Menjangan. Es la mayor isla del Taman Nasional Bali Barat (Parque Nacional de Bali Occidental), el único parque nacional de Bali, y sus aguas ofrecen algunas de las mejores inmersiones y salidas de buceo con tubo de Bali (y de toda Indonesia).
Con más de una docena de puntos de inmersión repartidos por las aguas turquesas que rodean Pulau Menjangan, submarinistas y buceadores con tubo descubrirán corales y esponjas de todas las formas y tamaños, así como peces de todos los colores y tonos imaginables, aventurándose en grutas sumergidas y buceando junto a espectaculares paredes. Es el típico paraíso acuático que uno imagina al soñar con Bali, y que se descubre al sumergirse en las aguas próximas a Pulau Menjangan.
Los viajeros que deseen conocer este mundo submarino con tranquilidad pueden disfrutar del buceo con tubo más sencillo jamás imaginado. Los barcos les transportan muy cerca del coral, en las aguas poco profundas cerca del muelle de Pulau Menjangan, donde suaves corrientes arrastran al buceador más allá de este impresionante espectáculo natural. Con poco esfuerzo se puede llegar al punto donde el coral forma una gran pared de 30 m. Es el punto de partida de muchas inmersiones, y un sitio en el cual los buceadores con tubo se ven rodeados de esferas plateadas, las burbujas de los submarinistas que bucean por debajo.
Además de una gran cantidad de peces payaso y peces loro, si hay suerte, se pueden ver pelágicos de mayor tamaño. Tiburones ballena, mantas y ballenas suelen frecuentar la zona. Los submarinistas tienen más opciones para ver a estos gigantones y, además, pueden explorar los restos del naufragio del Anker Wreck, un carguero de madera del s. XIX que vertió su carga de botellas, cerámica y cobre por todo el lecho marino.
Los arrecifes junto al muelle Pulau Menjangan son el punto de inmersión más popular, pero se puede pedir al barquero que ponga rumbo al lado norte de la isla, menos visitado, donde hay menos submarinistas y más peces. Pemuteran tiene muchas tiendas de submarinismo y cualquier hotel o resort organiza inmersiones y salidas de buceo con tubo.
Dónde dormir y comer en Pemuteran
Al iniciarse los planes para incluir el turismo en la economía pesquera tradicional de Pemuteran, un grupo visionario de líderes comunitarios, expatriados e inversores ideó un plan para evitar que esta entonces remota joya acabara convertida en otra Kuta u otro Legian.
El territorio de la playa se dividió en grandes terrenos que hoy albergan los resorts más bonitos de Bali. Bungalós de estilo tradicional se esconden entre frondosos jardines. No es un sitio masificado y no hay edificios de más de una planta. Más allá de la playa se ven calles pequeñas con pensiones familiares y un puñado de cafés y restaurantes. No hay nada hortera ni chillón; el paso lo marcan los ritmos locales.
Entre los muchos sitios excelentes donde alojarse, Taman Sari es típico de Pemuteran: sencillo y tranquilo, con una docena de bungalós repartidos por un espacio amplio a lo largo de la playa. Matahari Beach Resort, más de estilo boutique, tiene todo el encanto del estilo balinés y ocupa un tramo tranquilo de playa. En el interior, Jubawa Homestay, es una de las muchas opciones económicas y confortables alejadas de la playa, construida en torno a una deliciosa piscina. Todos los resorts tienen buenos restaurantes, pero ninguno supera el encanto –y la comida balinesa– de Bali Re, regentado por una familia.
Cómo llegar a Pemuteran
Hay varias formas de llegar a Pemuteran desde el sur de Bali, pero ninguna es tan sublime como la carretera de Antosari, que empieza al oeste de Tabanan. Esta carretera secundaria panorámica no se puede comparar con la autopista de la costa, en la cual los conductores quedan atrapados entre camiones sobrecargados y humeantes que van y vienen de la ciudad portuaria de Gilimanuk y los ferris de Java.
La otra ruta panorámica a Pemuteran es la del lago montañoso de Danau Bratan, con su icónico templo, Pura Ulun Danu Bratan, que se alza sobre el agua con 11 gráciles tejados. La ruta principal a Pemuteran continua hacia la capital regional Singaraja, al norte, y después corta hacia al oeste a través de Lovina. Una alternativa menos concurrida es tomar la apacible carretera rural de Danau Bratan a través del cautivador pueblo cimero de Munduk, famoso por su clima templado, sus impresionantes vistas y sus rutas excursionistas a las cataratas de los bosques.
Para disfrutar de vistas espectaculares en ambas direcciones se puede llegar por los bancales de arroz y las vistas impecables de Antosari Road, e ir vía Munduk y Danau Bratan en la otra dirección. El viajero se sorprenderá al ver tanta belleza natural y tan poca gente disfrutándola.