En Haití es posible gastar unas cuantas gourdes en fritay (comida
frita de puestos callejeros) o comer en el elegante Pétionville por 30 US$ el plato. El local más típico es el barresto (menos formal que un restaurante), donde se puede comer un generoso plato de carne de cabra o pollo con
plátanos macho, ensalada y una cerveza por 5 US$. No suele haber mucha verdura en los menús, pero abunda la fruta fresca. El marisco es excelente y abundante por toda la costa.
Las brillantes banderas vudú constituyen una de las expresiones artísticas más inusuales y llamativas. Estas drapo (banderas), que se usan durante ceremonias vudú, son magníficas: confeccionadas con miles de cuentas y lentejuelas cosidas en arpillera, reflejan la luz procedente de cualquier ángulo.
El distrito de Bel Air es el centro tradicional de producción de estas banderas, que se pueden adquirir como recuerdo directamente de los artesanos. Los artistas más destacados son Yves Telemaque y Silva Joseph, un sacerdote vudú. Hay otros artistas reconocidos en el distrito de Nazon, tales como Ronald Gouin y Georges Valris.