He aquí un paraíso fascinante, encasquetado entre los picos de los Andes y el Amazonas, para salir de senderismo, escalada, excursionismo y ciclismo.
El viaje hasta aquí ya es divertido. Los senderistas pueden partir de las inmediaciones de La Paz, por los caminos de Takesi o El Choro hasta el corazón de los Yungas. También se puede ir a los Yungas del Sur, a un día de descenso por la Carretera Más Peligrosa del Mundo. Se recomienda descansar unos días al final de la carretera en las agradables Coroico o Chulumani, donde aguardan excursiones cortas, sitios para bañarse y un ambiente distendido de viajeros. Desde allí, se puede regresar a la capital y seguir hasta la cordillera Real, para salir de escalada y senderismo, con una parada en el sencillo y fresquito pueblo de Sorata, del que parten infinidad de senderos bastante duros. También hay buenas rutas de ciclismo de montaña o se puede subir a los picos helados de la cordillera. Si sobra tiempo, se puede seguir hasta la cordillera Apolobamba para conocer tribus perdidas, mineros y caminos que se adentran a la naturaleza profunda.